Revolución Educativa: ¿Puede Latinoamérica cerrar la brecha digital y transformar la educación?
TRANSFORMACION DIGITAL
La educación es uno de los pilares fundamentales en el desarrollo de una sociedad y hablar de educación en Latinoamérica, muchas veces también conlleva hablar de la desigualdad que existe para acceder a ella y de la escasa calidad educativa.
Por otro lado, la innovación y el desarrollo tecnológico avanzan de forma acelerada en todo el mundo, impactando la forma en que nos desarrollamos socialmente,, incluyendo los sistemas educativos.
En este artículo, haremos un acercamiento deconstructivo a cómo Latinoamérica está afrontando la adopción tecnológica en la educación y mencionaremos algunas de las principales tecnologías que influyen en esta transformación, como la inteligencia artificial.


Cambios en el sistema educativo por la transformación digital
La transformación digital involucra cambios importantes en la educación, ya que la incorporación de tecnologías en los distintos niveles de enseñanza, desde básica hasta superior, están permeando en el proceso de aprendizaje como lo conocemos.
Las Apps, la Inteligencia Artificial y la Realidad Aumentada pretenden complementar los programas educativos, argumentando que reforzar con un aprendizaje basado en tecnología y utilizar recursos digitales, podría acelerar el proceso educativo.
El objetivo de Desarrollo Sostenible No. 4 nos indica que lo primordial es garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad para todos, promoviendo oportunidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida y fomentando la adquisición de habilidades relevantes para el empleo y el desarrollo sostenible. Por lo que surge la pregunta, ¿Realmente estamos en el camino de alcanzar una educación accesible y de calidad?
O bien, la acelerada transformación digital pudiera estar afectando negativamente la capacidad de los estudiantes para desarrollar competencias básicas como su análisis, el pensamiento crítico y la creatividad, ya que constantemente aparecen herramientas tecnológicas que pareciera que pueden facilitar estos procesos o en muchos casos, sustituirlos (estamos cada vez más cerca).


Ante esta problemática, un punto intermedio podría ser lo que muchos programas escolares definen como fomentar el desarrollo de habilidades STEM y la resolución de problemas mediante el pensamiento computacional, lo cual implica resolver problemas descomponiéndolos por partes, buscando patrones y creando soluciones detalladas, lo que permite a los estudiantes desenvolverse mejor en un mundo cada vez más digitalizado.
Repensar la relación entre tecnología y aprendizaje
Si analizamos críticamente la relación entre la tecnología y el aprendizaje, la implementación de herramientas digitales no garantiza por sí misma una mejora en la calidad educativa, pues como se ha señalado innumerables veces, “es necesario desarrollar una pedagogía de la pregunta” (Freire, P. 1970), para fomentar un ambiente de aprendizaje en el cual los alumnos se sientan incentivados a explorar, cuestionar y reflexionar sobre el conocimiento y sus propias ideas.


La tecnología puede ser una herramienta poderosa para mejorar la educación, pero también puede generar desigualdades si no se implementa de manera equitativa y considerando las necesidades específicas de cada contexto (Castells, M. 2001). Además, en ese proceso de implementación, es crucial no perder de vista la importancia de habilidades sociales y emocionales, que no pueden ser reemplazadas por la tecnología.
Es necesario tener en cuenta factores como la brecha digital en Latinoamérica, ya que como indicamos al principio de este artículo, no todos tienen las oportunidades de acceder a la educación y mucho menos a la tecnología o incluso a herramientas informáticas esenciales como una conexión de internet.
Otros factores que son clave al momento de disminuir o aumentar la brecha digital son la capacitación de los docentes en el uso de tecnologías, contenido digital en idiomas locales y políticas gubernamentales (UNESCO, 2011).
Tecnología y educación en equilibrio
La transformación digital en el sistema educativo nos presenta la oportunidad de revolucionar y enriquecer la educación de futuras generaciones. Sin embargo, es esencial reconocer que la tecnología por sí sola no es la solución. Debemos abordar los desafíos de la brecha digital, los cuales podemos resumir en:
Capacitar a los educadores
Disminuir las barreras culturales
Velar por una mejor conectividad a Internet


Adicional, debemos enfocarnos en fomentar habilidades de pensamiento crítico y creatividad en los estudiantes, mientras aprovechamos el potencial que la tecnología ofrece. La tecnología debe ser un potenciador de nuestras capacidades, no un sustituto de las misas.
Debemos tener en mente que para comenzar a mover estos accionables, no es necesario esperar a que las figuras del gobierno promuevan legislaciones, ya que depender de ello históricamente ha representado un obstáculo más que un beneficio. Si bien, debemos exigir y no caer en una postura pasiva, el verdadero ejercicio para cerrar la brecha digital será posible gracias a la colaboración entre gobiernos, empresas y organizaciones de la sociedad civil.


Desde Deconstruir.me creemos que esta visión será clave para sacar provecho de la transformación digital en la educación. El principio para lograr una educación de calidad y equitativa radica en un enfoque que combine la innovación tecnológica con el desarrollo humano, la inclusión y la diversidad cultural. Solo así podremos construir un futuro en el que todos los jóvenes estén preparados y empoderados para enfrentar y superar los retos que les presenta un mundo en constante evolución.
Bibliografía:
Freire, P. (1970). Pedagogía del oprimido. México: Siglo XXI.
Castells, M. (2001). La Galaxia Internet: Reflexiones sobre Internet, empresa y sociedad. Barcelona: Plaza & Janés Editores.
UNESCO. (2011). Transforming Education: The Power of ICT Policies. Paris: United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization.